Hoy he dado el día por hecho, sólo pesas, primero brazos y unos pectorales.
Después piernas, cuádriceps en todas las máquinas que tiene el gimnasio, y unas sentadillas con paso adelante cargado con una barra.
Horrible, lo llevo peor que correr.
Hoy no hay datos de pulsómetro, porque de nuevo me lo he vuelto a dejar en casa, así que ni calorías, ni tiempos, ni pulsaciones, ni nada, bueno, ni nada de datos, porque dolor de brazos, pecho y piernas tengo para apuntar varios libros.
Mañana de nuevo sesión aeróbica, aunque empezaré con unas pesas para calentar, y después haré bici, carrera, y terminaé con unos minutos en la elíptica.
Mañana os cuento.
Somos más grandes de lo que creemos. El título de este blog viene por un regalo recibido hace tiempo, en el que aparecía la foto de un iceberg. Desde que vi esa foto, en la que se mostraba la parte sumergida del iceberg, me hizo darme cuenta que todos tenemos algo oculto que nos puede llevar a donde elijamos. Esa parte será la que consiga hacerme cumplir el sueño de ser finisher en el medio, y por qué no, algún día hacer el triatlón con mayúsculas, el Ironman.
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