lunes, 20 de mayo de 2013

Muere otro día. Crónica de mi primer Ironman

No, no soy Pierce Brosnan ni del agua salió Halle Berry, pero me siento tan grande como James Bond.

Llevo un rato pensando cómo conseguir una crónica breve, pero una prueba que me llevó más de 1 año entrenando y más de 12h compitiendo, no se merece que la crónica sea breve, no sería justo. Lo del título, viene por un tuit que me envió Álvaro, mi primo, que me dio una gran idea.

Si aún así, no tienes tiempo, como resumen te puedo decir que es Increible, inigualable, irrepetible, especial, único, emocionante, satisfactorio, y muy muy muy duro.

Si tienes un poco de tiempo, el relato largo comienza aquí.

Llegué a Lanzarote el miércoles, e hice la zona sur en coche para reconocer el circuito de bici y de relax, que me había levantado a las 5 para currar. El jueves día de entreno suave matutino, mini triatlon para quitar nervios y no parar el cuerpo del todo, 2000m de agua, 40min de bici y 10k de carrera, todo MUY suave.

La tarde del jueves antes de ir al briefing y a la pasta party hicimos reconocimiento del circuito de bici que discurre por la zona norte de la isla, y de ahí al Club La Santa a por el dorsal y el resto de material y una cena copiosa a base de pasta y caprichos.

El viernes amanecí sin nervios y salí a rodar con la bici, muy poco, sólo para probar que los cambios, frenos y ruedas seguían en su sitio, al volver preparar todo y al checkin. El ambiente es espectacular, 1800 participantes y sus acompañantes inundan la avenida de Puerto del Carmen, se respira triatlón por todas las esquinas, y eso mola, verte involucrado en semejante historia no tiene precio, verme en la cola del checkin, ver que era yo quien esperaba su turno mientras la gente camina alrededor del recinto de los box y comenta te pone la piel de gallina.

Mi turno, paso, busco mi hueco y dejo la bici en su sitio, las bolsas al suyo, y me paseo como un niño con zapatos nuevos entre la gente y las bicis, saludo a algún amigo que me encuentro y salgo antes de que los nervios me machaquen.

Ya está todo hecho, no hay vuelta atrás, quedan poco más de 12 horas y dará comienzo un sueño por el que llevo mucho tiempo luchando.

Todo el día sin tomar café hace que me entre sueño temprano, y a las 10 estoy en la cama, el despertador debería sonar a las 4:30, pero a las 2 de la mañana me despierto y me desvelo, voy al despertador y lo adelanto, no puedo dormir más, me preocupa no haber descansado lo suficiente, pero no hay remedio, así que a desayunar. No improviso ni experimento, un par de vasos de leche de avena, magdalenas y tostadas con miel, caliento un poco en casa, estiro y comienzo a beber sales, sigo calentando y estirando, reviso la ropa y me enfundo el neopreno, son las 5:30 y toca salir de casa.

De camino a los box me acompaña Montse y nos cruzamos con la gente que sale de los garitos y aún está de fiesta, yo con mis sales y ellos con sus copas, cada uno a lo suyo.

En el box hay ambiente, gestos similares hinchando ruedas, comprobando bidones, y neoprenos a medio poner, me dirijo a la zona de la playa donde dará comienzo la natación y Montse rodea los box para encontrarnos en la salida. En ese intervalo de tiempo comienza a llover, serán cuatro gotas, que aquí nunca llueve, pero no, la lluvia se prolongó mucho más de lo esperado.

Mientras caliento en la orilla del agua con los pies en remojo, van llegando participantes, Montse me echa la vaselina en el cuello y me termino de enfundar el neopreno, calentamientos con él puesto para ajustarlo y al arco de salida. La gente se agolpa buscando su sitio y me coloco por detrás de los que saldrán en 65 min, no quiero guerra en el agua, me encuentro con un amigo, no saludamos, abrazamos y hablamos, comentamos y nos reimos, nos animamos y de nuevo un abrazo deseandonos suerte y fuerza para el camino.

Aplaudimos a los pros, pistoletazo de salida, y la música de Carros de Fuego suena de fondo, la piel de gallina aparece de nuevo y pienso dónde estoy y el tiempo que llevo invertido en ello, sólo queda disfrutarlo.

Ya en el agua el chapoteo, los brazos, piernas, manotazos y patadas hacen acto de presencia desde el metro cero, pero me abro un poco, y encuentro un hueco que me lleva hasta el primer giro, eso sí, un poco pasado de metros, no me preocupa, prefiero llegar entero, más manotazos pero nada del otro mundo, hasta que un tipo me pasa por encima nadando, LITERAL, totalmente cruzado, un tirón un poco más tarde me hunde un poco y cuando me quiero dar cuenta estoy terminando la primera vuelta, parece que ha parado de llover. Salimos del agua, y giro para la segunda vuelta, la primera en 34 minutos, satisfecho, esta vez no me abro tanto, para intentar recuperar los metros que perdí en la primera vuelta, y error, no perdí metros pero no pude nadar a mi ritmo, intento salir del grupo dónde me metí pero es imposible, continuo hasta el siguiente giro y ahí sí que puedo cambiarme de lado, veo un hueco y me hago el último largo casi sin tocarme con nadie, de pronto aparece el arcoiris y nadar hacia él en la última vuelta empuja, es una chorrada, pero me gustó, y además me ayudó a que esos últimos metros no pensase en nada, tiempo total del agua 1h 12min. Lo esperado.

Carrerita por la arena, me paro en las duchas y me aclaro la cabeza para quitar la sal, a la transición, y cambio de indumentaria, toca la bici, me calzo, casco, cambio de gafas, pido que me echen crema, cojo un gel y una barrita y al lío. Encuentro la bici sin problema, me había fijado una buena referencia y salió bien. La grada ya estaba repleta y las aceras llenas de gente animando, mi familia gritando y yo con ganas. Comienza a llover, muy duro ir en bici con lluvia, sientes el agua bajar por el cuello, piernas y pies, las gafas se mojan, pero queda mucho y no hay tiempo ni es el momento de lamentarse por un poco de lluvia. Miro tiempos y velocidades y voy bien, 30 de media está en lo previsto, más tarde seguro que bajaré, pero más tarde ya llegará, ahora a comerse unos kilómetros.

Mi plan era seguir las indicaciones de @irontriax (Pep), "come todo lo que puedas, que en la maraton no podrás", y así lo hice, comí, mucho, todo lo que había pensado y más, hasta un bocadillo de tortilla para el avituallamiento especial. Pep, gracias por el consejo. En Teguise el apoyo del público y en especial el de los tuyos (mi hermano, cuñada, mi padre y Montse) hacen que el sufrimiento sea menos y te sale una sonrisa aunque no haya ganas de sonreir. De la ruta de la bici del Ironman de Lanzarote os puedo decir que es dura, muy dura, subir Haría especialmente, la bajada es impresionante y hacía frio, pero rápido se llega a la subida del mirador del Rio y eso hace que entres en calor de nuevo, viento en contra fuerte, pero unas vistas que consiguen que olvides lo que estás sufriendo. Coronando el Río me di cuenta que había pasado hacía un rato la mitad de la prueba de la bici y que sólo me quedaban un par de subidas en los km que faltaban, y casi todo era favorable, bajadas largas, viento a favor y a volar. Sigo comiendo, bebiendo y disfrutando, las piernas van bien y hasta ahora ni un problema.

Última subida, Nazaret, la familia de nuevo, y me paro a saludarles, les cuento que voy bien, y sigo, tramo de asfalto en MUY MAL estado y subida a Conil, primer síntoma de calambre en el cuádriceps izquierdo en un intento de apretar un poco, decido parar y estirar en condiciones, momento en el que decido que en cuanto llegue a casa pongo la bici en venta, vuelvo a subir y puedo terminar los últimos 20 km sin ninguna molestia, y aprovecho para comer una barrita de magnesio y potasio, sin molestias, pero sigo pensando que la mejor opción es vender la bici.

La avenida de Puerto del Carmen es una fiesta, está llena de gente, mucha gente corriendo, otros que aún llegamos, pero todo el mundo aplaude y anima.

Transición para la carrera, cambio de zapatillas y camiseta seca, tomo otro gel antes de empezar, y me guardo un pump gel de Victory Endurance para "el muro", gorra, dorsal y a por mi primera maratón.

Salgo sin estirar, tengo pensado hacerlo en el punto donde esté la familia animando, y antes del primer kilómetro me los encuentro, paro, estiro, charlo y comienzo a correr, miro el Garmin, y ritmos de 4:35, muy fuerte pero no aflojo, ya llegará el momento de suavizar, me encuentro bien, y corro, en los avituallamientos bebo en todos y tomo un gel uno sí uno no, pero tengo que beber parado, en carrera me lo tiro todo por encima y no sé, NOVATO!!! Punto de giro, sin pensarlo he hecho 10 km con viento en contra, ahora toca correr sin sufrir tanto de viento, me cruzo con @valentísanjuan (le grito señoooraaaaa) nos chocamos la mano, seguimos corriendo, primera vuelta en 1h 48min, miro el reloj y de seguir así bajaría de 12 horas, no me lo puedo creer, continuo, saludo a la familia, y en el km 27 aparece un dolor en la rodilla derecha que me machaca, no puede ser, paro y desaparece inmediatamente, en cuanto empiezo a correr vuelve, lo ignoro y sigo, el dolor me acomparía el resto del camino, y a este se suma un dolor en el tobillo derecho que desde niño, debido a varios esguinces mal curados nunca he vuelto a tener bien, tanto impacto de la carrera le pasan factura y se queja, se queja mucho, pero tambien lo ignoro, ya no me paro a beber porque el dolor de comenzar a moverme de nuevo es mucho peor que el que me acompaña, no bebo, no como, no paro, sólo pienso en la meta y los útlimos 6 kilómetros los hago pensando en el arco de llegada, en Montse, en mi familia, en el tatuaje que me voy a hacer para no olvidar esto.

El pasillo final parece una romería, la gente se agolpa a los lados del carril por donde corremos, animan, aplauden, gritan tu nombre y te invitan a seguir, a que no pares, notas su aliento, sus gritos, sus ánimos, y en ese último kilómetro me acuerdo de twitter, de la gente que me envió ánimos los días antes, @spiritugonzalez (Javi, el policía que corre maratones y que además escribe), @vriverop1964 (Victor, un AMIGO que conocí en el OceanLava) y que me llamó el viernes, gracias crack, @pasku_01 (Álvaro, mi primo del alma), @JaviMaseda (otro Javi, que siempre está ahí), @La_Vane_WITL (Vane, con su dorsal 69, que también fue Finisher), @DavidGalan1 (David, que me ha animado desde el principio), @cristong (Cristian, que me gritaba MÁQUINA a cada paso por su lado en la maratón), @pisaelpedal (Clinton, una máquina del ciclismo de ultradistancia), @VictorDelCorral (Victor, mil gracias por tus palabras), Teo, Luis Arraez, Angelo, Rafa, Carlos, Miguel, Gumer, Antonio, Diego, Lorena, Lore, Jorge, Esteban, Jesús,  ..., y muchos mas (perdón porque se me quedan muchos sin mencionar) que me animaron y empujaron a conseguirlo, y así, pensando en todas esas palabras de cariño y ánimos de la gente llegué a puertas de meta donde estaba mi familia, pude chocar la mano con ellos y levantar las manos en señal de una victoria, ser FINISHER del Ironman de Lanzarote, con un tiempo de 12 horas 40 minutos. En ese momento me acordé de las frases típicas de la maratón, en el km 42,195 supe que me había convertido en alguien muy duro de matar, es una carrera de 12km que comienza en el 30, ..., y sí, una vez superado, Muere otro día, porque ese no iba a ser.

Experiencia inolvidable, que durante la maratón juré no repetir, y que hoy me gustaría volver a hacer, porque esa recompensa es mucho mayor que el sufrimiento.

Gracias Montse por aguantar tantas horas que empleé entrenando, por perdernos tantas cosas por tener que entrenar, por obligarte a madrugar, a viajar, a nadar, y por aceptar no disfrutar de muchas cosas, Nano, por los ánimos y por haberte pegado la kilometrada para ir a verme, Bro, por estar ahí, por los gritos, los ánimos, por hacer de chofer, por aguantarme los caprichos (por las fotos no te voy a dar las gracias, jajaja), cuñada, ya sé que tu a Lanzarote fuiste por ir a la playita, y no para verme, jajajaja, pero te perdono y muchas gracias por estar ahí, por madrugar para verme, por gritarme, por todo, mil gracias a los 4.

En breve vuelvo a la carga, que en octubre nos espera La Bocaina, 15km a nado entre Lanzarote y Fuerteventura.

7 comentarios:

  1. Enhorabuena crack!!
    Muy buena crónica, dan ganas de hacer un IM (algún día caerá, no tengo duda jajjaja)
    Nunca habías corrido una maratón hasta el IM??

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    1. Muchas gracias Carlos. Anímate, es algo que merece la pena sentir, no hay palabras para describir la recompensa al sufrimiento de la carrera y al sacrificio del entreno.
      Y no, nunca había hecho una maratón, y creo que no haré otra hasta el siguiente IM que haga, jajaja, de hecho, nunca había corrido más de 26, pero no hace falta.
      Gracias por leerme, por comentar y por la enhorabuena.

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  2. Joder, leyendo tu relato me estaba emocionando y cuando he visto que me nombras se me han caido unas lágrimas. Eres un campéon amigo. Ahora rucuerdo cuando decidiste emprender esta aventura, como ha pasado el tiempo, cuanto has entrenado entre medias para conseguir el objetivo soñado. Sé por algún amigo que este año ha sido una edición muy dura por la climatología pero tú has sabido vencer, gracias a consejos como los de Pep y ánimos de tu familia y amigos. Es muy grande lo que has conseguido. Como diría tu amigo Josef Ajram: ¿dónde está el límite para ti campeón?
    Un abrazo y gracias por nombrarme en esta entrada y por apoyar a Espíritu González desde sus comienzos.

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  3. Enhorabuena, Angel.
    Has hecho realidad un sueño a través del esfuerzo, entrenamiento y dedicación. Siéntelo y disfrútalo porque te lo has ganado.
    Estoy seguro que cualquier cosa que te propongas en esta vida la conseguirás, con la misma dedicación con la que te has exigido en este IRONMAN.
    Un abrazo muy fuerte, Javi.

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  4. Gracias por tu crónica, muy bonita... Me alegro tanto cada vez que leo algo así, cada vez que recibimos un agradecimiento... Es lo que nos motiva a nosotros para trabajar con ilusión para intentar que cada año el IRONMAN LANZAROTE sea aún más grande, aún mejor, aún más vuestro y nuestro a la vez... GRACIAS por elegir este IRONMAN y por disfrutarlo! Un abrazo mío y otro de todos los que estamos detrás del telón, Isa

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  5. He tardado en entrar a tu blog y leerlo. Pero para alguien como yo que no vive el deporte como tu, le dan ganas de entrenar y poder disfrutar de ese pedazo de historia que tiene que ser el terminar un Ironman. Saludos y a seguir entrenando mientras las lesiones antiguas te dejen!

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